viernes, 30 de mayo de 2014

Para estudiantes de 10º -Jornada Tarde.30 de Mayo de 2014.



LAUREANO VIVE
Publicado: 18 Marzo 2011
RICARDO CHICA GELIZ

Hermandad independentista y Caribe: hago circular este excelente artículo del periodista y catedrático cartagenero Ricardo Chica Gelis, sobre el racismo encubierto en Colombia, ese que muchas veces tuercen los confundidores profesionales como Héctor Abad, Daniel Samper Pizano y demás miembros de una fauna que dicen "que el negro es más racista que todos", no sé si por ignorancia o perversidad, porque si se revisa el concepto "racismo", en los casos de natural reacción de nuestra parte, como en el Urabá antioqueño, es un mero mecanismo de defensa contra el discurso colonial vigente desde antes de Laureano y en el cual la mayoría del catolicismo - con varias excepciones en el pasado y presente como las de Fray Alonso de Sandoval y los curas del proceso Golconda incluyendo Arnulfo Romero- han ayudado a posicionar.
NIKO
 Laureano Gómez
"Otros primitivos pobladores de nuestro territorio fueron los africanos, que los españoles trajeron para dominar con ellos la naturaleza áspera y huraña. El espíritu del negro, rudimentario e inconforme, como que permanece en perpetua infantilidad. La bruma de una eterna ilusión lo envuelve y el prodigioso don de mentir es la manifestación de esa falsa imagen de las cosas, de la ofuscación que le producen el espectáculo del mundo, del terror de hallarse abandonado y disminuido en el concierto humano”. Esto declaró en cierta ocasión Laureano Eleuterio Gómez Castro (Bogotá 1889 – 1965)
.Si uno quiere conocer parte la mentalidad colombiana, tiene que conocer la historia de Laureano Gómez, su vida política, su liderazgo católico y su incidencia en los modos de ser del pueblo. Gómez fue presidente de Colombia de 1950 a 1951 cuando debido a su delicado estado de salud, cedió temporalmente el poder a Roberto Urdaneta Arbeláez. El 13 de junio de 1953 retornó al poder, siendo rápidamente depuesto en un golpe de estado por el General Gustavo Rojas Pinilla.  Para mí Laureano Gómez vive en nosotros en virtud de nuestra intolerancia, de la rabia que nos habita, de nuestro fanatismo, de nuestro fundamentalismo, de nuestras manifestaciones de irracionalidad. Laureano fue un entusiasta promotor de las ideas nazistas, fascistas y racistas a partir de las cuales reforzó su hispanofilia como elemento ideológico fundamental del partido conservador y, me atrevería a decir, de nuestra sociedad en general. Todavía en 1938 Gómez sostenía la tesis de los años 20 sobre el determinismo geográfico, es decir, que los seres humanos que viven en climas fríos y templados son superiores a los que vivimos en climas cálidos y a orillas de ríos y mares. Mi apuesta es que Laureano vive porque en sus tiempos fue –sin ser cura-representante ardoroso de la iglesia católica, una institución que cogobernó (¿cogobierna?) largamente en Colombia, pues, desde siempre ha sido un aparato más poderoso que institución alguna, incluido el ejército, el ejecutivo, el legislativo o el judicial. La alianza Gómez e iglesia permitió difundir con eficacia el pensamiento del primero, pues, a la larga, ya la gente colombiana era laureanista antes de que este naciera. Somos así católicos y alcohólicos: un hilo conductor que nos hace oscilar entre la culpa y el arrepentimiento.
 La liturgia católica fue el más atractivo espectáculo, si no el único de las clases pobres desde la colonia y hasta hace muy poco (al decir de Carlos Uribe Celis) y sobre ello cabalgó Laureano para difundir una visión política y cultural que no es que haya tenido gran resistencia, hasta nuestros días. Laureano vive en el caso de Yenny Castro la estudiante de derecho que fue agredida el mes pasado por un grupo de jóvenes que portaban armas deportivas del estilo “paintball” (bola de pintura). No creo que este sea un caso aislado de racismo. Para mí, la expresión más sofisticada de esta mentalidad en Cartagena, es cuando se niega su práctica o existencia en nuestra sociedad. Racismo negado por los propios negros y negras.
 Estamos perdidos, pues, negar la discriminación racial es aceptar que las cosas como están, están bien. De ahí que el caso de Yenny Castro y lo que decidan las autoridades, sea tan importante, pues, ello repercutirá en pensarnos como afro descendientes en un contexto social y cultural donde la mentalidad laureanista nos caló tan hondo. Los afro descendientes en Colombia, tenemos dentro un pequeño Laureano que nos hostiga, que nos humilla, que nos mantiene postrados en el lugar que nos han confinado. Ser negro es bueno y sabroso pero también es muy problemático, trágico muchas veces. Y esto último no tiene porqué ser así. Creo, como muchos, que el re –aprendizaje es la forma colectiva de comenzar a superar el fardo católico laureanista que nos habita. Cada vez menos se oyen chistes racistas, pues, al parecer, se están regulando las prácticas de intolerancia racial. El ímpetu laureanista encontró eco y fuerza en el sistema educativo y en los textos escolares diseñados según directrices de la iglesia de la época, lo que sin duda, ha tenido sus consecuencias hasta hoy.
 El caso de Jenny Castro y el modo como se plantee el debate nos puede permitir interrogar a ese terrible Laureano mental. Publicado: 18 Marzo 2011
RICARDO CHICA GELIZ
Desarrolla tus competencias
1. ¿Que plantea el autor del texto Ricardo Chica  Celis acerca del racismo en Colombia?
2. ¿Por que afirma que Laureano vive en nosotros?
3. ¿Qué es el Nazismo y el fascismo? ¿.Porque Chica lo relaciona con el racismo?
4. ¿Que plantea el determinismo geográfico? ¿Estas de acuerdo con él?
5. ¿La idea de que el Costeño es flojo está fundamentada en el determinismo geográfico?
6. Interpreta: En Colombia el racismo esta encubierto.
7. Estás de acuerdo con las afirmaciones de Héctor Abad, Daniel Samper Pizano de  "que el negro es más racista que todos”. Argumenta tu respuesta.

ANTROPOLOGIA MODERNA-10º-Mayo 30 de 2014.




 
Durante el periodo de la antropología moderna se destacaron varias corrientes filosóficas. Estas corrientes empezaron con el racionalismo  y terminaron con Hegel, y a partir de él se dan movimientos como el positivismo y el materialismo ideológico. Por medio de éstas se trataba de dar respuestas a las preguntas ¿Qué es el hombre? ¿Cómo se define el hombre? Por medio de esta ficha conoceremos las respuestas que dieron los filósofos más influyentes de la edad moderna según los métodos que seguían.
 
  ROUSSEAU  
 
Juan Jacobo Rousseau (1712-1778) formó parte de los intelectuales cuyas ideas inspiraron la transformación del mundo durante el siglo XVIII y XIX. Las ideas políticas de Rousseau  influyeron en gran medida en la revolución francesa, el desarrollo de las teorías y el crecimiento del nacionalismo.  Su herencia de pensador radical y revolucionario esta probablemente mejor expresada en sus dos mas celebres frases, una contenida en el contrato social: <<el hombre nace libre, pero en todos lados está encadenado>> <<el hombre es bueno por naturaleza>>. De ahí su idea de la posibilidad de una educación.
Para él, el hombre se encuentra en una paradoja del ser natural y libre que es el estado donde nace el ser artificial o social que es la estructura que se impone.
  KANT
El hombre y la historia: “Kant parte de que el hombre, según su naturaleza, es un conjunto de disposiciones originales:
  • Disposición a la animalidad como ser viviente
  • Disposición a la humanidad, como ser viviente y racional
  • Disposición a la personalidad, como ser racional y moral” 
Esto quiere decir que Kant propone que el hombre es un ser integral que está conformado por diferentes aspectos importantes que abarcan todos los eventos: la parte emocional, social y laboral.  Cuando nos habla de disposición a la animalidad como ser viviente nos da a decir sobre la capacidad técnica que tiene cada persona lo cual es el conjunto de habilidades y conocimientos de cada quien.
La disposición a la humanidad que viene a ser algo que tiene que ver más con la razón, algo pragmático. El hombre es un ser que no puede vivir solo, solo es de una forma mientras que en sociedad es de otra forma.
La disposición a la personalidad es cómo podemos entender, la forma de comportarme del hombre tanto en la sociedad como solo, sus valores, sus sentimientos, etc.  “Esta es la estructura radical que del hombre y que pone de manifiesto una dualidad de dimensiones: A.- La empírico – sensible, es decir conseguir sus propios fines egoístas. B.- La ético - social es decir, la dimensión moral” (La razón gobierna mi vida) Sólo la tercera disposición tiene como raíz una razón que no es un medio condicionado a alcanzar determinados objetivos, sino que es ella misma un fin incondicionado: es la razón práctica que legisla la vida humana según.
La historia es un desarrollo progresivo de las disposiciones originarias del género humano en su totalidad. La filosofía de la historia kantiana plantea en qué medida, en que condiciones y hasta qué punto la historia puede llevar a cabo la realización del fin máximo o supremo, que es un fin moral, que vendría siendo la realización de la libertad como bien supremo. “Kant habla de la historia como historia universal en sentido cosmopolita (sociedad de ciudadanos del mundo) y la acción practico política ha de organizarse en este sentido, comportando la mayor realización de la libertad” la filosofía kantiana trata de explicar en qué tiempo, en qué forma, en qué circunstancias y bajo qué condiciones el hombre alcanza el fin supremo que él dice ser LA LIBERTAD…
HEGEL
Pueden distinguirse tres grandes planos de la reflexión metafísica de Hegel.  En primer lugar, está el plano en el que se describe la totalidad de lo real tal como aparece pero como aparece en y por el hombre. Este es el plano fenomenológico de la metafísica hegeliana. “La phänomenología —dice A. Kojeve— es la ‘Ciencia de las apariciones del espíritu’, es decir, de la totalidad del ser real que se revela a sí mismo por el discurso del hombre que el Ser implica”
Pero, en segundo lugar, a Hegel le parece que no basta con la mera descripción fenomenológica de las “apariciones del espíritu” para dar cuenta científica y concretamente de la esencia de lo real. “Según él, el filósofo debe preguntarse por cuál deba ser la Realidad-objetiva que últimamente haga posible la aparición de ella misma en tanto que “fenómeno”. Como escribe Kojeve: “el Filósofo todavía se pregunta cuál debe ser la realidad objetiva (...), es decir el mundo real [natural y humano], para poder ‘aparecer’ de la misma manera como ‘parece’ efectivamente en tanto que  ‘fenómeno’”. En tercer lugar, según Hegel, el nivel de reflexión filosófica anterior es todavía insuficiente —por no transcender hacia la mismidad del ser— para dar cuenta cabal de la  esencia de la realidad.  Esto no puede menos que forzar al filósofo, cree Hegel, hacia un nivel de reflexión en el que la pregunta sea por la índole del propio ser; esto es, a un nivel de reflexión de carácter ontológico.
  COMTE
Comte basa su filosofía con la revuelta moderna contra los antiguos que inició Francis Bacón y extendió L’enciclopédie, también los acusa de generar utopías metafísicas irresponsables e incapaces de otorgar un orden social y moral a la humanidad ya que toma como trasfondo la Revolución Francesa.
Comte afirma que únicamente la ciencia positiva o positivismo podrá hallar las leyes que gobiernan no sólo la naturaleza, sino nuestra propia historia social, entendida como la sucesión y el progreso de determinados momentos históricos llamados estados sociales.
La ley de los tres estados y la idea de progreso “Este tránsito de un estado a otro constituye una ley del progreso de la sociedad, necesaria y universal porque emana de la naturaleza propia del espíritu humano” es necesario este transito ya que son etapas en las que el  hombre busca las causas del ser, del existir o el por qué de las cosas.
Según dicha ley los tres estados son:
  1.  estado teológico
  2.  estado metafísico
  3.  estado positivo
 
Estado teológico
El hombre busca las causas últimas y explicativas de la naturaleza en fuerzas sobrenaturales o divinas, primero a través del fetichismo y, más tarde, del politeísmo y el monoteísmo.  
  Estado metafísico
En este estado ya se reemplaza el racionalismo teológico por entidades sobrenaturales y abstractas. “Comte. considera esto como una época de transito del espíritu y su madurez”
Estado positivo. En este estado el hombre ya no busca saber lo que son las cosas sino gracias a su observación y experiencia sobre estas trata de explicar su comportamiento. A este estado de conocimientos le corresponde la sociedad industrial, capitaneada por científicos y sabios expertos que asegurarán el orden social.
MARX
“Para Marx no existe una realidad ajena al hombre y un hombre ajeno a la realidad sino que ambos se conforman en una mutua relación dialéctica”
Como el hombre vive en sociedad la realidad a estudiar viene siendo una sociedad concreta y no una realidad extraña a ella que no existe. Según la teoría del “Materialismo Histórico esta sociedad ha ido cambiando a lo largo del tiempo pero este proceso siempre ha seguido un esquema general que se resume en la relación entre la Base Económica y la Superestructura” La base económica es el modo en que se organiza la producción material en una sociedad concreta. La Superestructura es el conjunto de leyes, ideas y costumbres, la cultura, que se relaciona con dicha forma de producción.
Marx en su análisis del capitalismo entra a la conclusión de que este no es bueno para la humanidad ya que impide el desarrollo de la libertad y felicidad de la misma.
El capitalista posee los medios de producción, el obrero trabaja en ellos. Como se le paga un salario, aparece así como si el obrero hubiera recibido un intercambio justo pero esto no es así, pues el sueldo no paga el trabajo, ya que entonces no habría beneficio capitalista, sino la fuerza de trabajo, un dinero para seguir manteniendo al obrero en el circuito de la producción.
 
PREGUNTAS
  1. ¿cuál es la forma de pensar de Kant respecto al hombre?
  2. ¿qué quiere decir esta frase: “el hombre nace libre, pero en todos lados esta encadenado”
  3. ¿estás de acuerdo con lo que Marx dice acerca del capitalismo? Justifica tu respuesta
  4. ¿Cuál es el pensamiento de Comte. acerca del hombre?
  5. Analiza a estos 5 filósofos y di cuales tienen ideas semejantes acerca del hombre y por que

 

domingo, 25 de mayo de 2014

Para 11º-25 de Mayo-2014





FUNDAMENTO DEL ESTADO DEMOCRÁTICO *
Por Baruch Spinoza
Así, pues, se puede formar una sociedad y lograr que todo pacto sea siempre observado con máxima fidelidad sin que ello contradiga al derecho natural, a condición que cada uno transfiera a la sociedad todo el derecho que él posee, de suerte que ella sola mantenga el supremo derecho de la naturaleza a todo, es decir, la potestad suprema, a la que todo el mundo tiene que obedecer, ya por propia iniciativa, ya por miedo al máximo suplicio.
El derecho de dicha sociedad se llama democracia; ésta se define, pues, la asociación general de los hombres, que posee colegialmente el supremo derecho a todo lo que puede. De donde se sigue que la potestad suprema no está sometida a ninguna ley, sino que todos deben obedecerla en todo. Todos, en efecto, tuvieron que hacer, tácita o expresamente, este pacto, cuando le transfirieron a ella todo su poder de defenderse, esto es, todo su derecho. Porque, si quisieran conservar algo para sí, debieran haber previsto cómo podrían defenderlo con seguridad, pero, como no lo hicieron ni podían haberlo hecho sin dividir y, por tanto, destruir la potestad suprema, se sometieron totalmente, ipso facto al arbitrio de la suprema autoridad. Puesto que lo han hecho incondicionalmente (ya fuera, como hemos dicho porque la necesidad les obligó o porque la razón se lo aconsejó), se sigue que estamos obligados a cumplir absolutamente todas las órdenes de la potestad suprema, por más absurdas que sean, a menos que queramos ser enemigos del Estado y obrar contra la razón, que nos aconseja defenderlo con todas las fuerzas. Porque la razón nos manda cumplir dichas órdenes, a fin de que elijamos de dos males el menor.
Adviértase, además, que cualquiera podía asumir fácilmente este peligro, a saber, de someterse incondicionalmente al poder y al arbitrio de otro. Ya que, según hemos demostrado, las supremas potestades sólo poseen este derecho de mandar cuanto quieran, en tanto en cuanto tienen realmente la suprema potestad; pues, si la pierden, pierden, al mismo tiempo, el derecho de mandarlo todo, el cual pasa a aquel o aquellos que lo han adquirido y pueden mantenerlo. Por eso, muy rara vez puede acontecer que las supremas potestades manden cosas muy absurdas, puesto que les interesa muchísimo velar por el bien común y dirigirlo todo conforme al dictamen de la razón, a fin de velar por sí mismas y conservar el mando. Pues, como dice Séneca, nadie mantuvo largo tiempo gobiernos violentos.
Añádase a lo anterior que tales absurdos son menos de temer en un Estado democrático; es casi imposible, en efecto, que la mayor parte de una asamblea, si ésta es numerosa, se ponga de acuerdo en un absurdo. Lo impide, además, su mismo fundamento y su fin, el cual no es otro, según hemos visto, que evitar los absurdos del apetito y mantener a los hombres, en la medida de lo posible, dentro de los límites de la razón, a fin de que vivan en paz y concordia; si ese fundamento se suprime, se derrumbará fácilmente todo el edificio. Ocuparse de todo esto incumbe, pues, solamente a la suprema potestad; a los súbditos, en cambio, incumbe, como hemos dicho, cumplir sus órdenes y no reconocer otro derecho que el proclamado por la suprema autoridad.
Quizá alguien piense, sin embargo, que de este modo convertimos a los súbditos en esclavos, por creer que es esclavo quien obra por una orden, y libre quien vive a su antojo. Pero esto está muy lejos de ser verdad, ya que, en realidad, quien es llevado por sus apetitos y es incapaz de ver ni hacer nada que le sea útil, es esclavo al máximo; y sólo es libre aquel que vive con sinceridad bajo la sola guía de la razón. La acción realizada por un mandato, es decir; la obediencia suprime de algún modo la libertad; pero no es la obediencia, sino el fin de la acción, lo que hace a uno esclavo. Si el fin de la acción no es la utilidad del mismo agente, sino del que manda, entonces el agente es esclavo e inútil para sí. Ahora bien, en el Estado y en el gobierno, donde la suprema ley es la salvación del pueblo y no del que manda, quien obedece en todo a la suprema potestad, no debe ser considerado como esclavo inútil para sí mismo, sino como súbdito. De ahí que el Estado más libre será aquel cuyas leyes están fundadas en la sana razón, ya que en él todo el mundo puede ser libre, es decir, vivir sinceramente según la guía de la razón, donde quiera. Y así también, aunque los hijos tienen que obedecer en todo a sus padres, no por eso son esclavos: porque los preceptos paternos buscan, ante todo, la utilidad de los hijos. Admitimos, pues, una gran diferencia entre el esclavo, el hijo y el súbdito. Los definimos así: esclavo es quien está obligado a obedecer las órdenes del señor, que sólo buscan la utilidad del que manda; hijo, en cambio, es aquel que hace, por mandato de los padres, lo que le es útil; súbdito, finalmente, es aquel que hace, por mandato de la autoridad suprema, lo que es útil a la comunidad y, por tanto, también a él.
Con esto pienso haber mostrado, con suficiente claridad, los fundamentos del Estado democrático. He tratado de él, con preferencia a todos los demás, porque me parecía el más natural y el que más se aproxima a la libertad que la naturaleza concede a cada individuo. Pues en este Estado, nadie transfiere a otro su derecho natural, hasta el punto de que no se le consulte nada en lo sucesivo, sino que lo entrega a la mayor parte de toda la sociedad, de la que él es una parte. En este sentido, siguen siendo todos iguales, como antes en el estado natural. Por otra parte, sólo he querido tratar expresamente de este Estado, porque responde al máximo al objetivo que me he propuesto, de tratar de las ventajas de la libertad en el Estado. Prescindo, pues, de los fundamentos de los demás Estados, ya que, para conocer sus derechos, tampoco es necesario que sepamos en dónde tuvieron su origen y en dónde lo tienen con frecuencia; esto lo sabemos ya con creces por cuanto hemos dicho. Efectivamente, a quien ostenta la suprema potestad, ya sea uno, ya varios, ya todos, le compete, sin duda alguna, el derecho supremo de mandar cuanto quiera. Por otra parte, quien ha transferido a otro, espontáneamente o por la fuerza, su poder de defenderse, le cedió completamente su derecho natural y decidió, por tanto, obedecerle plenamente en todo, y está obligado a hacerlo sin reservas, mientras el rey o los nobles o el pueblo conserven la potestad suprema que recibieron y que fue la razón de que los individuos les transfirieran su derecho. Y no es necesario añadir más a esto.
Spinoza, Baruch, TRATADO TEOLÓGICO-POLÍTICO, Capítulo XVI.
Traducción, introducción, notas e índices de Atilano Domínguez.
Madrid: Alianza Editorial, 1986.
* Este título no está en el original. [P.B.]

Desarrolla tus competencias
1.    Leer varias veces el texto, subraya las palabras desconocidas y buscar su significado.
2.    Consultar la Biografía del autor del texto: Baruch Spinoza.
3.    .Explique que plantea el texto.
4.    Según el texto, cuál  es el fundamento de un Estado Democrático?
5.    Define con tus propias palabras que es democracia.
6.    ¿Colombia según la visión del autor es una democracia?
Consulta las diferentes formas de gobierno que han existido a través de la historia de la humanidad y a través de un cuadro determina sus característic